martes, 5 de octubre de 2010
ESQUELETOS EN EL ARMARIO
GATOPARDEANDO
Por Hugh Player
Debo confesar. Aunque no figura en mi prontuario (hoja de vida dicen los maricas).
Yo fuí Presidente de Mesa. Me gané treinta mangos por día en esos dos domingos en que se perpetró uno más de los grandes robos electorales de la historia contemporánea del Perú.
Yo, por eso sé, que el sistema está viciado desde su origen: el gobierno del choro japonés y su pareja (y compañero del chilingui) Vladimiro.
Así que no me vengan a aventar a la trinchera norte congresal de Unidad -Domestics Services Rights- Nacional para tratar de calificar de terroristas mediáticos a quienes nos atrevemos a decir la verdad cuando ellos tienen casi todos los medios en la mano. Que cuajo. Hasta para conchuditos tienen que ser borders.
Menos ese caballerito al que a simple vista le podemos ver su escasa muñeca política. Ni él, ni la tocayita que parece una actriz secundaria de Amarcord con esa voz de recia pisquera y menos aún a Salinitas pintándose de bravo macho recio. Semejantes mutantes. Respetos guardan respetos. Regresen a su corral nomás, tránquilos. Yo sé que el robo comenzó en la Onpe apenas llegaron las actas y cuando empezaron a digitar las mismas, restándole votos a la doña en salmuera para aumentárselos a quien llegó a un saludable acuerdo democrático con el poder.
En el año 2000, mi vieja estaba en Usa (ella estaba inscrita en la misma mesa que yo, en el Colegio Teresa Gonzales de Fanning) y sin avisarnos nada, se vino desde los yunaites -donde estaba de ilegal- votó por Fujimori y se regresó a la media hora a seguir buscándosela por allá. Es mas, mi viejo, que estaba de viaje también (el andaba por el cosmos desde 1988 cuando el Jefe Supremo lo mando llamar para su evolución de conciencia) también había sido de los del ritmo del chino y se vino desde el mundo de los espíritus a votar por el ladrón oriental.
Ellos eran -como muchos en esos tiempos- fujimoristas radicales sin saberlo.
Esto lo averigué cuando al consultar las actas por internet pude constatar que habían cambiado los resultados que yo registré e inscribí en las mismas (las que primorosamente protegí con un plástico transparente adhesivo) y de las que los militares corruptos de esa época tenían una copia para salvaguaradar la voluntad popular. Lo mismo se está haciendo ahora. Ya hay denuncias.
La pregunta que los partidos en cualquier contienda no se hacen es por lógica siempre la más evidente y necesaria: ¿Y los digitadores?.
¿Cómo se contratan? ¿dónde estan las pruebas y los currículums de los postulantes? ¿son terceros, servicios no personales, cas, nombrados? ¿a qué movimiento político pertenecen? ¿cuánto ganan por su chamba? ¿tienen bonos especiales?
En el 2000 esta gente fue contratada en los arrebales anaranjados del oficialismo de entonces. Digamos que era una chuzma de lo mas solvente.
Diez años después podemos preguntar legítimamente si sabemos con confianza en quienes hemos puesto la seria tarea de ingresar los datos consignados en las documentos al sistema electrónico de la ONPE respetando los resultados que figuran en los mismos. ¿Gente ética y honesta?.
Me dice mi amigo el Dr Peter Garca -suceptible a las teorías de la conspiración- que la conveniente fusión de mesas, el tránsito demorado casi ausente y caótico, las declaraciones posteriores de los tucanillos para reseñarnos el futuro y la impugnación -u observación, llámenla como quieran, sarta de boludos sinverguenzas- de votos y actas por consigna, obedecen al plan de entregar la alcaldía a una derecha que sabe respetar los arreglos del dinero. Y pareciera que hay mucho en juego teniendo como fondo de pantalla, las elecciones generales del próximo año.
Este blog no tiene la mas mínima simpatía por Jaime Bayly pero ayer, cuando se atrevió a hacer unos pincelazos con pequeñas dosis de realidad, fue desautorizado por su propio canal que le colocó un cintillo blanco que además de señalar que el era el responsable de sus opiniones (como normalmente se hace) le agregó el triste, patético, cagón y echado comentario que indicaba que el canal estaba en desacuerdo con el. Verguenza ajena. Yo me hubiera largado del set ahí nomás.
Entendemos que las claúsulas contractuales obligaron al conductor a quedarse. Lo raro es que cuando pasa lo mismo con otros conductores y otros gustos, el susodicho canal aplaude como una prostituta que sabe que alaban a su caficho.
¿De cuánto es el cheque ésta vez, viejo colchoncitos indemnizado por el cholo?.
La primera parte del plan sigue en marcha y bien ha hecho Fuerza Social en presentarse en la ONPE a meter presión y a exigir algo de velocidad, que ya buena está la tortuga pero tampoco tampoco, que sea tan grande la concha.
Igual hay que hacer en el JNE y en cuanto oficina del poder electoral exista para quebrales el ánimo de trampearnos a la mala. No hay otra forma.
Estamos ante la malagua mas venenosa y maleada de la derecha, la de los vínculos con el narcotráfico emergente, la cuchillera de la cuadra en el penal de emprendedores del hampa, la obviamente delincuencial sin retorno.
Me estoy cansado de escupirles el estofado.
Pero aquí les dejo una tarea para su casa, a ver si el perro aprende alguna gracia:
¿No estarán creando a una candidata casi fija para la presidencia -vista por el pueblo (ya harto de un sistema que lo maltrata a diario) como despojada de un legítimo triunfo- con ésta idiota y hambrienta desesperación por el contrato con Florentino, el del Real Madrid?
La creatura verá luz según la decisión que ustedes tomen si pretenden seguir jugando a la ruleta rusa con una magnun 44 cargada.
Y pensar que será ella (su propia creación) quien finalmente les entregue su inevitable, inexorable, atávico paso al final. Que ironía. Que trágica suele ser la vida de los tontos.
Esta me lo dijo mi amigo, el Gatopardo, Príncipe Fabrizio Salina (*).
(*) Nada que ver con los Salina de Alberti que se creían golpistas democráticos y posibles alcaldes en sus -bastante locas- ambiciones políticas. ¡Andaaaaa!
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